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El equipo de Bordalás, con una plantilla mucho más joven e inexperta, registra números casi idénticos a la temporada del último título de Copa ante el Barcelona
ANTONIO CASAÑ
Era la jornada número 23 de LaLiga, temporada 2018-2019 y el Valencia empataba en Mestalla a cero con la Real Sociedad. Ocupaba el octavo lugar en la tabla con 31 puntos y se encontraba 6 puntos del cuarto puesto, con 6 partidos ganados, 13 empatados y 4 perdidos. El equipo de Marcelino acabó en cuarta posición y fue campeón de Copa.
En la presente edición, tras empatar en Mestalla ante la Real, el Valencia es décimo primero con 30 puntos, acumula 7 victorias, 9 empates y 7 derrotas, y se encuentra a 5 puntos de puestos europeos y a 8 de clasificación Champions, en la semana que afronta la ida de las semifinales de Copa.
En la temporada 18/19, Marcelino contaba con un grupo experto de futbolistas: Neto, Piccini, Jeison Murillo, Diakhaby, Garay, Rubén Vezo, Gabriel Paulista, Gayá, Roncaglia, Martin Montoya, Waas, Kondogbia, Coquelin, Parejo, Cheryshev, Carlos Soler, Ferran Torres (al que por cierto el técnico asturiano quiso ceder a principio de temporada), Simone Zaza, Sobrino, Batshuayi, Gameiro, Rodrigo, Santi Mina, Guedes…
Clasificación jornada 23 Liga 18-19/ANS
En este ejercicio, Pepe Bordalás ha contado de aquella plantilla con Jaume, Waas (hasta enero), Dhiakaby, Soler, Gayá, Toni Lato y Cheryshev. En el caso de Gabriel Paulista, que lleva más de tres meses de baja, su participación ha sido anecdótica. Por contra, la puerta está mejor guardada que entonces, con Jasper Cillessen y Giorgi Mamardashvili.
A principio de temporada llegaron el portero Mamardashvili (21 años) y Omar Alderete, Dimitri Foulquier, Hugo Duro y Marcos André, cuatro hombres solicitados por el entrenador valencianista y que se unieron al grupo de los Racic, Hugo Guillamón (21 años), Maxi Gómez (25 años) o Hélder Costa.
El resto de plantilla lo conforman en este momento, Thierry Rendall (22), Jesus Vázquez (19), Cristian Mosquera (18), Hugo Guillamón, Yunus Musah (18), Racic, Koba Koindredi (20), Rubén Iranzo (18), César Tárrega (19), Menargues (19), Burlamaqui (19), Alemañ (19), Diego López (19)…, y por supuesto, Ilaix Moriba (19), Bryan Gil (20).
Con estos mimbres, sin un mediocentro de nivel, es con lo que Bordalás iguala los números de Marcelino de hace dos temporadas y se dispone a afrontar una semifinal de Copa con Alderete, Diakhaby, Paulista, Cömert y Guillamón tocados o lesionados directamente.
Sin embargo, y de cara a los 42 puntos que quedan por disputar, el entrenador del Valencia ha visto rearmado su eje defensivo con la incorporación de Eray Cömert y las cesiones de Ilaix Moriba y Bryan Gil para la parcela central. Además, en el horizonte, un calendario liguero más despejado que el del mes de enero, el Mundial de Catar y lo que significa de cara a la galería de los jugadores internacionales, y el magnífico estado de forma de sus hombres-gol, Hugo Duro y Gonçalo Guedes.
Mención aparte merecen los arbitajes que esta sufriendo el equipo. Tras el inolvidable e inexistente penalti señalado en el Camp Nou de Gayá a Ansu Fati, basta con el ejemplo de Hernández Hernandez, que tras inventarse el penalti a Casemiro para el 1-0 en el Bernabeu, no ha vuelto a pitar más partidos desde entonces. Ayer, en una jugada más clara que la de Cömert el día del Cádiz, no se señaló una pena máxima de Le Normand a Maxi y se descontaron tan solo 4 minutos, cuando solo la atención a Guillamón y Merino sobrepasaron de sobra ese tiempo.
El apoyo del Valencia a la gestión de Tebas en todos los aspectos, pasa factura con la designación arbitral del CTA, con actuaciones que demuestran el nivel de los colegiados en LaLiga, con mucha diferencia, el más bajo de las grandes ligas europeas.
